C011 Añadir a Howard W. Thurman al Calendario de la Iglesia Episcopal

Esta resolución es paralela a una resolución presentada ante la Convención General en 2022 y en preparación para la Convención General de 2024 por la Diócesis del Norte de California para añadir a Howard Thurman al Calendario Eclesiástico, comúnmente conocido como Fiestas y Festejos Menores. La Convención General de 2022, celebrada en Baltimore, ordenó a la Comisión Permanente sobre Liturgia y Música que siguiera estudiando si Thurman debía añadirse al Calendario.

Aunque las directrices han variado en la consideración por parte de la Iglesia de las figuras adecuadas para añadirlas a Fiestas y Ayunos Menores, Howard Thurman se acerca rápidamente a la calificación estándar de dos generaciones desde su muerte. Además, el reconocimiento local de la obra de Thurman, tanto dentro como fuera de la Iglesia, ha resurgido en los últimos años. Por último, es difícil exagerar la influencia de su testimonio cristiano en el movimiento por los derechos civiles del siglo XX y su lucha continua en nuestros días.

Antecedentes:

Howard Washington Thurman (18 de noviembre de 1899 – 10 de abril de 1981), tuvo una enorme influencia en el movimiento de los derechos civiles y en sus líderes. Thurman nació en Florida, estudió en el Morehouse College y se ordenó como pastor bautista. Fue nombrado primer capellán negro de la capilla Marsh de la Universidad de Boston, la cual hoy cuenta con un centro que lleva su nombre.

En la década de 1930, Thurman dirigió una peregrinación de afroamericanos a la India, la cual duró seis meses, y ahí conoció a Mohandas Gandhi, quien tuvo una influencia fundamental en su trabajo. Thurman escribió un libro pionero en 1949, Jesus and the Disinherited (Jesús y los desheredados), en el que incorporó las teorías de Gandhi sobre la no violencia, así como material que había desarrollado ya en 1935. El volumen incluye estas palabras fundamentales, tan proféticas hoy como lo fueron hace casi un siglo:

Jesús rechazó el odio. No porque le faltara vitalidad o fuerza. No por falta de incentivos. Jesús rechazó el odio porque vio que el odio significaba la muerte de la mente, la muerte del espíritu, la muerte de la comunión con su Padre. Afirmaba la vida; y el odio era la gran negación. Para él estaba claro.

No debes causar divisiones.
Tu mente, tu corazón, tu alma y tu fortaleza deben buscar siempre
Para encontrar el camino
Que debe seguir la necesidad de ti que tienen todos los hombres.
Ese es el Camino del Señor.
La religión de Jesús pone en el centro la ética del amor…

Una vez definido el prójimo, la obligación moral personal es clara… Todo hombre es potencialmente prójimo de otro hombre. La buena vecindad no es espacial; es cualitativa. Los hombres deben amar a su prójimo directamente, con claridad, sin permitir barreras de por medio

(Jesus and the Disinherited, capítulos cuatro y cinco).

El trabajo de Thurman tuvo un gran impacto en un joven estudiante del ministerio, Martin Luther King, Jr. En años posteriores, el Dr. King llevó el libro de Thurman en su maleta durante sus viajes como líder del movimiento por los derechos civiles. Thurman también fue mentor de Pauli Murray, quien se convirtió en la primera mujer negra ordenada presbítera episcopal y a quien recientemente se agregó al calendario de la Iglesia Episcopal. Después de salir de la Universidad Howard, Thurman fundó una iglesia racialmente integrada en San Francisco. En 1974 fue nombrado canónigo honorario de la catedral episcopal de St. John the Divine en Nueva York. Thurman murió en San Francisco en 1981.

La revista Ebony calificó en una ocasión a Thurman como una de las 50 figuras más importantes de la historia afroamericana. En la década de 1950, la revista Life situó a Thurman entre los 12 líderes religiosos más importantes de Estados Unidos.

En la Iglesia en general están surgiendo conmemoraciones y reconocimientos locales de la vida y obra de Thurman. Desde 2021, varias congregaciones de la Diócesis del Norte de California, incluida la Catedral de la Trinidad de Sacramento, han celebrado actos litúrgicos, seminarios y foros centrados en la vida de Thurman.El libro de Thurman, Jesus and the Disinherited, se utiliza en el programa Suelo Sagrado de la Iglesia Episcopal y como texto complementario en nuestro programa de Educación para el Ministerio. Ambos programas están activos en comunidades de toda la Diócesis de California. Algunas escuelas del Área de la Bahía incluyen ahora lecturas de Jesus and the Disinherited en sus planes de estudios. Los discursos, artículos y libros de Thurman han sido tema de recientes seminarios, webinarios y retiros en una amplia variedad de entornos eclesiásticos y seculares. Su obra está archivada y se estudia en muchas instituciones de enseñanza superior, como el Boston College y la Facultad de Teología Candler de la Universidad Emory. Además, la Iglesia no confesional para la Comunidad de todos los Pueblos que fundó en San Francisco sigue siendo una vibrante comunidad de culto, la cual patrocina la Convocatoria anual Howard Thurman.

Nuestro Calendario Eclesiástico conmemora a quienes desde el pasado nos siguen hablando en nuestro tiempo. El calendario autorizado incluye a más de 230 personas, pero solo unos 12 son afroamericanos, y solo un puñado son del siglo XX, incluidos Martin Luther King, Jr., Pauli Murray, Anna Julia Haywood Cooper y Thurgood Marshall. Nuestro calendario rinde homenaje a numerosos educadores y teólogos de una amplia gama de denominaciones y tradiciones religiosas (Evelyn Underhill, Elizabeth Ann Seton y F. D. Maurice, por nombrar solo a tres). Sin embargo, nuestro calendario episcopal refleja apenas tenuemente las ricas contribuciones de los teólogos, educadores y líderes religiosos afroamericanos que desempeñaron un papel significativo en la configuración del movimiento por los derechos civiles y, más ampliamente, en la forma en que nos comprometemos con las difíciles cuestiones de raza y justicia en nuestro mundo actual.

En la introducción de Fiestas y Ayunos Menores de 2022 se dice lo siguiente sobre el motivo por el que se incluye a las personas en el calendario: “Lo que celebramos en la vida de los santos es la presencia de Cristo expresándose en y a través de ciertas vidas vividas en medio de circunstancias históricas específicas. En los santos no tratamos con absolutos de perfección, sino con vidas humanas, en toda su diversidad, abiertas al movimiento del Espíritu Santo”.

Thurman cumple sin duda esta descripción y su incorporación a nuestro calendario es muy necesaria.