D012 Condicionar la Ayuda Militar Estadounidense a Israel a los Derechos Humanos y a una Paz Negociada

La Iglesia Episcopal tiene un largo historial de alzar la voz en cuestiones de derechos humanos para instar al gobierno de EE. UU. a que tenga en cuenta los derechos humanos en su política exterior. Esta resolución ampliaría los compromisos de nuestra iglesia en materia de derechos humanos, reafirmando nuestros compromisos básicos establecidos desde hace largo tiempo y especificando que la ayuda militar y las tecnologías relacionadas deben estar siempre condicionadas a la adhesión a las normas de derechos humanos, incluyendo específicamente el conflicto entre Israel y Palestina, donde las leyes estadounidenses sobre el condicionamiento de los derechos humanos han sido objeto de un trato especial e ignoradas en la práctica.[i][ii]

Aunque el gobierno de EE. UU. también ha asumido ciertos compromisos en este ámbito mediante la firma de compromisos internacionales como los Acuerdos de Helsinki y a través de las “Leyes Leahy” y las “Enmiendas Leahy”, que actualmente figuran en la Ley de Ayuda Exterior (modificada) de 1961 y en la ley de asignaciones del Departamento de Defensa,[iii] no siempre cumple estos compromisos. La defensa y las campañas sostenidas de la sociedad civil, incluidas las comunidades religiosas, siempre han sido importantes para exigir a nuestros gobiernos que cumplan sus propias normas. El movimiento antiapartheid de Sudáfrica es quizás el ejemplo más conocido, pero ha habido otros, como los emprendidos para acabar con las guerras en Centroamérica en la década de 1980 y en pro de los derechos humanos en Darfur. Los líderes de derechos humanos de todo el mundo le han pedido al gobierno de Estados Unidos que revise sus obligaciones en materia de derechos humanos conforme al derecho estadounidense e internacional en su suministro de armas a Israel durante el conflicto actual.[iv]

Esta resolución también ampliaría el apoyo de nuestra iglesia a la sanción de organizaciones y personas extremistas y pediría condicionar la ayuda estadounidense a cualquier parte basada en compromisos demostrados para poner fin a la ocupación y al conflicto. Al momento de escribir este documento, Estados Unidos ha sancionado a cuatro personas del proyecto de colonos extremistas de Cisjordania implicadas en actos terroristas contra palestinos. Estados Unidos podría y debería hacer más en términos de acciones concretas para presionar a las personas y los grupos que están alimentando el aumento de la violencia, incluidos los propios ministros del gobierno israelí que financian y arman a los extremistas.

Esta resolución pediría la liberación del resto de los rehenes israelíes secuestrados el 7 de octubre y detenidos en Gaza, así como de los presos palestinos, incluidos niños, sometidos a “detenciones administrativas” prolongadas, es decir, detenidos sin cargos durante largos períodos en violación de las normas internacionales de derechos humanos.

Esta resolución exigiría condicionar la ayuda a pasos medibles hacia un acuerdo de paz negociado, que es la única manera de garantizar una seguridad duradera para los pueblos de la tierra. De hecho, la Iglesia Episcopal ya ha manifestado su compromiso con una paz negociada en pasadas Convenciones Generales —por ejemplo, en 2018, la Convención General pidió “plenos derechos humanos y civiles con la regla democrática de una persona, un voto”— ya sea que se forme a través de dos estados, un estado binacional o algún tipo de confederación, reconociendo que “el derecho de ningún pueblo a la autodeterminación debe ejercerse a expensas del derecho de otro, y que cualquier solución negociada debe basarse en el reconocimiento mutuo de la humanidad y los sufrimientos pasados y presentes de todas las partes y proporcionar garantías para los derechos humanos y civiles de las minorías étnicas y religiosas dentro de cualquier estado, federación o frontera nacional que pueda crearse”.[v]

Aunque la Convención General lo ha dicho antes, no es redundante —de hecho, es urgente— dada la devastación del 7 de octubre y en todos los meses transcurridos desde entonces, alzar nuestras voces para presionar al gobierno de Estados Unidos para que apoye de palabra y de hecho una paz negociada que prevea la autodeterminación y los derechos para todos. El gobierno de Estados Unidos es cómplice de la terrible violencia de este año, ya que ha sido complaciente al proporcionar una ayuda significativa a Israel mientras que no ha presionado por una paz sostenible durante muchos años, y ahora ha proporcionado el armamento y la cobertura diplomática para la terrible guerra que se ha librado en Gaza, con decenas de miles de personas inocentes muertas, mutiladas y huérfanas, con cientos, quizás miles, de familias aniquiladas por completo, así como ciudades y valores culturales completamente arrasados; ahora Estados Unidos debe rendir cuentas ante el mundo al apoyar un acuerdo de paz duradero y ayudar a reconstruir ciudades y vidas devastadas.

No esperamos que la Iglesia Episcopal pueda por sí sola impulsar la política de EE. UU. en estas cuestiones, pero sí podemos unir fuerzas con otros grupos, incluidos nuestros socios cristianos ecuménicos, así como nuestros socios judíos, musulmanes y otros socios interreligiosos en pro de la paz, para exigir a nuestro gobierno un nivel más alto en la defensa de los derechos humanos y las normas democráticas en todos los países, incluidos los antiguos aliados de EE. UU. como el estado de Israel.

 

[i] “’Different rules’: special policies keep US supplying weapons to Israel despite alleged abuses” (Reglas diferentes: políticas especiales que mantienen el suministros estadounidense de armas a Israel, a pesar de supuestos abusos), por Stephanie Kirchgaessner, en The Guardian, 18 de enero de 2024. https://www.theguardian.com/world/2024/jan/18/us-supply-weapons-israel-alleged-abuses-human-rights?CMP=Share_iOSApp_Other

[ii] “The US may be flouting its own laws by sending unrestricted aid to Israel” (Estados Unidos podría estar desacatando sus propias leyes al enviar ayuda irrestricta a Israel), por Nicole Narea, en Vox, 23 de diciembre de 2023. https://www.vox.com/world-politics/24011316/us-aid-israel-biden-human-rights-leahy-law

[iii] “’Leahy Law’ Human Rights Provisions and Security Assistance: Issue Overview” (La Ley Leahy: disposiciones de derechos humanos y asistencia de seguridad. Resumen), por Nina M. Serafino, June S. Beittel, Lauren Ploch Blanchard y Liana Rosen, por el Servicio de Investigaciones del Congreso, 29 de enero de 2014. https://sgp.fas.org/crs/row/R43361.pdf https://sgp.fas.org/crs/row/R43361.pdf

[iv] “The Elders call for urgent review of foreign military assistance to Israel over Gaza atrocities” (Los patriarcas piden una revisión urgente de la asistencia militar extranjera a Israel debido a las atrocidades en Gaza), Declaración de los Patriarcas, 4 de diciembre de 2023. https://theelders.org/news/elders-call-urgent-review-foreign-military-assistance-israel-over-gaza-atrocities.

[v] Resolución 2018-D022 de la Convención General, “Comprometerse con una Solución Negociada al Conflicto Palestino Israelí”, https://episcopalarchives.org/cgi-bin/acts/acts_search.pl.

 

Documentos de Apoyo:

2022-D024-Condicionar la ayuda militar de EE. UU. a los Derechos Humanos 2022-D024-Conditioning U.S. Military Assistance on Human Rights

 

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